Hay que darnos alas para volar y ser libres, hacer lo que nos haga felices sin importar lo que otros digan o piensen. Hay que ser valientes y darnos la oportunidad de conocernos a nosotros mismos, surgir desde adentro y ser quienes somos en realidad. Muchas veces cuesta por todo lo que hemos aprendido, por el ambiente en que vivimos, por las costumbres que hemos adquirido, por todo lo que escuchamos, por el miedo al que dirán y por tantas cosas que nos impiden ser auténticos. Lo que quiero decir, es que aunque cueste y aunque aveces nos preguntemos tantas cosas, sólo hay que ser valientes y decidir ser auténticos.

Es importante que sepamos que cada uno de nosotros es único e irrepetible. Cada uno de nosotros tiene un propósito diferente que cumplir, no hay necesidad de desear lo que otros son, porque cada quien es como es porque tiene una misión distinta . Y es que siendo uno mismo contribuye con todos sus talentos beneficiando el mundo en el que vivimos.
A lo largo del camino he aprendido que ir contra la corriente genera estrés y ansiedad. Por el contrario, cuando uno es uno mismo siente confianza y seguridad que lo hace fluir con la vida. Y cómo es que se fluye con la vida? Sólo disfrutando del camino, sin pensar en el resultado, sólo viviendo en el hoy, teniendo la plena confianza que con tus capacidades y con tus talentos atraerás la abundancia necesaria para realizar cada uno de tus sueños.
Al ser uno mismo y al aceptarse por lo que es, y tal como es, uno aprende a amar la vida, a llenarse de vida… Te amas por que amas la vida y tu eres parte de ella, estas orgulloso de ser tu mismo y te defiendes a ti mismo como un león, nadie puede llamarte de ninguna manera porque tu sabes quien eres… nadie puede penetrar tu ser, tu propio valor como persona, sabes por qué? porque te das cuenta que has venido a este mundo a ser feliz y eso sólo lo podrás lograr cuando descubras en ti el tesoro que tu eres…
Hay formas de ver el mundo y es aceptable que cada quien lo vea como quiera, porque al final, es la única forma en la que tú eres capaz de verlo en ese momento , nadie puede negártelo, por que tú mismo vez la realidad de las cosas por tus propios ojos, no por los de nadie más, en ese momento sólo tú tienes razón y eso está bien, no tienes porque cuestionarlo, con tal que tú lo aceptes, no hay porque esperar que nadie más lo acepte. Porque al fin y al cabo haz venido a este mundo a ser quien eres.